La criminal política de becas del PP exige a muchas familias la devolución del importe de una beca que no pueden pagar
¡Basta ya de jugar con nuestro derecho al estudio!
El Partido Popular sigue con su campaña de ataques constantes a la educación pública. Su objetivo es negarnos el derecho a la educación a los que provenimos de familias normales y corrientes sin grandes recursos. Todas las contrarreformas educativas, los recortes, la desaparición de ayudas o la destrucción del propio sistema de becas reflejan a la perfección cómo Wert se esfuerza por ponernos problemas y trabas constantes para que no podamos llegar a la educación superior. El caso de las becas y todas las trabas con las que nos encontramos los que somos hijos de trabajadores son ya un secreto a voces. No sólo hablamos de la reducción drástica de las cuantías o el endurecimiento de las condiciones para las familias humildes. El gobierno quiere asfixiar económicamente a quien más necesita estas ayudas para expulsarles de la Universidad. Reproducimos más abajo la carta de un estudiante que explica la injusta situación a la que se enfrenta cuando se le reclama que devuelva el importe de la beca que le fue concedida. LEER MÁS...
Galería fotográfica de la sentada en el IES Menéndez Pidal de Avilés y del Comité de huelga del sábado 15 de marzo con representación de estudiantes de los campus universitarios del Cristo, del Milan, de Minas, del IES Astures (Lugones), del IES Clarin (Oviedo), IES Selgas (Cudillero), Jovellanos (Gijon), Número 1 (Gijon), IES Juan José Calvo Miguel (Sotrondio). 
¡AHORA, A POR LAS 150.000!
En estos tres últimos años el ministro Wert, ese nostálgico impenitente del franquismo, ha mostrado su fanatismo por la privatización de la enseñanza pública y su apoyo descarado a los sectores más retrógrados de la iglesia católica, que ven en la educación un gran negocio y un gran altavoz para el adoctrinamiento religioso. El nuevo currículo de religión supone un retroceso de décadas y una vía de entrada al modelo del nacionalcatolicismo que tantas generaciones tuvieron que sufrir.
Recientemente hemos recibido un documento del Consorcio de educación de Barcelona que demuestra cómo desde la Administración, CiU, trata de generar confusión con la finalidad de impedir a los alumnos poder ejercitar su derecho a la huelga. En dicho documento se insiste en la necesidad de tener autorización paterna por parte de los alumnos de cara a poder ejercitar este derecho a huelga, algo que ha sido rechazado recientemente en una Sentencia del Tribunal Supremo, que indica literalmente “que el ejercicio de ese derecho -tal como está legalmente configurado-no queda supeditado a ninguna autorización previa”. Las Administraciones, la Generalitat y el Ayuntamiento, deben garantizar los derechos de todos, incluidos los estudiantes que quieren ejercitar su derecho de huelga. CiU utiliza su poder institucional y el aparato administrativo no ya solo para impedir el ejercicio de un derecho democrático, como es el derecho de los estudiantes a la huelga y a protestar, sino que incluso lo hace saltándose la propia legalidad que dicen defender. ¡¡Vaya vergüenza!!
