¡Basta de ataques a nuestros profesores!
El pasado domingo se celebraron en Andalucía, cómo en gran parte del Estado, unas nuevas oposiciones para el cuerpo de maestros y, como viene siendo habitual en las últimas convocatorias, nos encontramos con que el proceso que tienen que afrontar nuestros futuros maestros y profesores, lejos de ser lo justo y transparente que debería, es una auténtica vergüenza.
El curso pasado vimos cómo los interinos andaluces se movilizaban para exigir al gobierno de Susana Díaz plazas fijas para todos aquellos profesores y profesoras que llevan años cubriendo plazas estructurales y ya han demostrado de sobra su capacidad. La Junta de Andalucía, cómo el resto de los gobiernos autonómicos se escuda en este proceso para no consolidar plantillas de docentes con la apertura de más plazas fijas, precarizando así a nuestros profesores y devaluando aun más la calidad de la educación pública. Docentes que cambian de centro tres o cuatro veces por curso, o que se incorporan con el curso empezado son una constante en nuestros colegios e institutos. Eso sin contar con las ratios que sufrimos en nuestras aulas o la falta de profesores de apoyo para los compañeros que lo necesitan. Sin embargo, lejos de ponerle remedio, vemos cómo los derechos de nuestros maestros y profesores se vulneran un año tras otro.
A la larga lista de irregularidades y reglas arbitrarias diseñadas únicamente para dejar en la cuneta al mayor número de maestros y profesores posibles, se suma la vulneración de los derechos de las personas con discapacidad, negándoles en los exámenes adaptaciones que tienen concedidas, como los audífonos. Pero el colmo ha sido que por un error cometido en la redacción de los supuestos prácticos, la Junta de Andalucía obliga a examinarse de nuevo a todos los futuros maestros de Pedagogía Terapéutica este viernes.
Esta medida, lejos de ser un intento de hacer más justo el proceso o de subsanar el error, supone una nueva criba, cuya primera barrera es económica ya que muchos de nuestros profesores han de volver a desplazarse para repetir el examen.
¡Basta ya de que nuestros maestros sean los que paguen los platos rotos de la Junta! Este tipo de oposiciones va en la misma línea de deterioro y recortes a la educación pública. No se puede obligar a pagar a nuestros maestros los errores de la Junta ni a penalizarlos por no repetir el examen.
Es por eso que desde el Sindicato de Estudiantes hacemos un llamamiento a los sindicatos de profesores a ponerse al frente de este nuevo ataque a los trabajadores y trabajadoras y exigir a la Junta de Andalucía y al Ministerio de Educación la creación inmediata de más plazas fijas que no sólo cubran todas aquellas plazas estructurales que son cubiertas por interinos, sino también las nuevas plazas que necesitamos para echar atrás todos los recortes que han profundizado la situación de precariedad de nuestros profesores. Para tener una educación pública, gratuita y de calidad es indispensable luchar por un puesto de trabajo digno para nuestros profesores y profesoras.
¡Basta ya de precariedad laboral!