¡No al Madrid de la especulación y la corrupción de Almeida y Villacís!
La llegada del gobierno de la derecha y la extrema derecha al Ayuntamiento de Madrid se ha inaugurado con la decisión de desalojar el Centro Social La Ingobernable, demostrando que una de sus prioridades será atacar a los movimientos sociales y a todas y todos los que les hacemos frente en las calles mediante la organización y la lucha. Este centro desarrolla más de 200 actividades para los madrileños y madrileñas, desde diversos cursos hasta clases de bailes y cursos de castellano para inmigrantes, y además acoge a numerosos colectivos sociales, poniendo salas a su disposición de cara a celebrar reuniones, asambleas y todo tipo de actos reivindicativos, algo muy necesario ante la falta de infraestructuras para ello en la ciudad de Madrid.
El edificio, de titularidad municipal, albergaba anteriormente un centro salud y una sede de la UNED, hasta que fueron cerrados por el Ayuntamiento del PP de Gallardón. Posteriormente, siendo ya alcaldesa Ana Botella, se rebajo su grado de protección de Nivel 2 a Nivel 3, de cara a permitir su demolición, a pesar de ser un edificio ejemplo de la arquitectura republicana de los años 30, y que por ello había recibido ese grado 2 de protección. Ana Botella cedió el edificio gratuitamente a la Fundación Emilio Ambasz, vinculada a los Aznar y a los Blesa, por 75 años, sin concurso alguno, es decir a dedo, planteándose una operación especulativa de cara a establecer un supuesto museo que finalmente fracasó, al producirse entre otras cosas el rescate de Caja Madrid, la destitución de Blesa y el estallido del caso de las tarjetas Black. A pesar de todo esto, parece que el PP, de la mano de Ciudadanos y Vox, quiere volver a las andadas y poder desalojar el edificio de cara a volver a hacer lucrativos y oscuros negocios. Esta es una de las razones del desalojo, ¡los negocietes de los amigos!
Desgraciadamente durante el mandato de Carmena, cuando esta cuestión podía haberse resuelto de cara a tratar de blindar este espacio social, no ha sido así. El Gobierno de Carmena prefirió negociar con esta supuesta Fundación, acordando indemnizarla de cara a recuperar el edificio con 1,4 millones de euros, decisión criticada por la propia Ingobernable y por los colectivos que la gestionan, ya que suponía avalar una operación de corrupción completamente ilegal y abusiva que dilapidaba el patrimonio municipal. Esta supuesta Fundación recibió una concesión gratuita, no invirtió ni un euro, y finalmente ha hecho un negocio redondo a costa de las arcas municipales. Y ahora encima el nuevo Ayuntamiento pretenderá devolverles el edificio. ¡Es un escándalo!
¡Basta de ataques contra las y los que luchamos!
El objetivo de este desalojo es tratar de amedrentarnos a todos y todas las que luchamos cada día contra los recortes y la austeridad, contra la especulación y la corrupción, y por un Madrid con espacios sanos de ocio, con actividades culturales, con salas de ensayos o de reuniones de cara a organizarnos y desarrollarnos como personas. Muchas y muchos hemos participado en este espacio organizando asambleas y actividades para luchar contra los recortes, la precariedad, la ley Mordaza o para paralizar desahucios, ¡y por eso quieren desalojar La Ingobernable! Al mismo tiempo, estos mismos que ahora intentan desalojarnos de nuestros espacios no han hecho otra cosa que llenarse los bolsillos y los de sus amigos, nadando en una inmensa ciénaga de corrupción. ¡Y esto es lo que pretenden de nuevo!
Desde el Sindicato de Estudiantes, Libres y Combativas e Izquierda Revolucionaria hacemos un llamamiento a defender este espacio social, La Ingobernable, y a participar en las diversas actividades y convocatorias de cara a defenderla y evitar su desalojo. No podemos permitir que sigan especulando salvajemente con nuestra ciudad para llenarse los bolsillos, apropiándose y borrando incluso nuestra historia, como ocurriría en caso de demoler este edificio. Por otro lado, es necesario que el Gobierno del Estado, en manos del PSOE, actúe ya, defendiendo en primer lugar dicho edificio otorgándole la máxima protección como Patrimonio Histórico, lo que de entrada reduciría las posibilidades de especulación con el mismo al impedir su demolición, y apoyando las justas reivindicaciones de La Ingobernable para la recuperación social de este espacio.
Es necesario levantar un amplio y fuerte movimiento de resistencia contra el nuevo Gobierno PP-Ciudadanos-Vox del Ayuntamiento de Madrid, comenzando por esta batalla en defensa de La Ingobernable. A la extrema derecha y a la reacción se les combate así, en las calles, organizándonos y resistiendo, y no con palabras bonitas, y por eso es necesaria la implicación no solo de los movimientos sociales, sino de Mas Madrid, Podemos, los sindicatos, etc… La mejor forma de recibir al nuevo consistorio es construir este movimiento de resistencia en las calles, comenzando por impedir mediante la lucha este desalojo.