Los recortes excluyen y nos condenan a la precariedad
Firma contra la exclusión y por una enfermería escolar digna
El pasado Octubre de 2017, el Departamentd’Educació del Govern de la Generalitat de Catalunya aprobaba el Decreto de Escuela Inclusiva, que prevé que todos los y todas las alumnas de una escuela o instituto han de tener cubiertas las necesidades de asistencia sanitaria dentro del propio centro. A pesar de su supuesta entrada en vigor, la realidad que vivimos en nuestros centros educativos es muy distinta: falta de personal de enfermería y ausencia de recursos para atender a las y los alumnos con necesidades médicas específicas y enfermedades crónicas. Esta situación alarmante es la consecuencia directa de las políticas de recortes y privatización del Govern de la Generalitat, iniciadas por Convergencia- ahora PDeCAT- y que no han estado revertidas por el gobierno de JxCat y ERC.
Por un servicio de enfermería escolar digno. ¡No a la exclusión escolar!
La falta de personal sanitario provoca que los tratamientos y cuidados que necesitan estos niños y niñas recaiga sobre las espaldas de las familias, de las madres y padres que se tienen que desplazar constantemente al centro para atender a sus hijos e hijas e, incluso, se tienen que pasar toda la jornada escolar en el interior de la escuela o esperando fuera del centro en el coche por si acaso se necesita su intervención urgente. Esta situación que estas madres y padres, en su mayoría madres, han sido despedidas de sus trabajos o se han visto obligadas a dejar de trabar para pasarse 24h al día pendientes de sus hijos e hijas.
Los cuidados de los y las estudiantes que padecen enfermedades como epilepsia refractaria, espina bífida, diabetes o traqueotomía tienen que ser realizados por profesionales médicos, que tengan los conocimientos adecuados para administrar y pinchar medicamentos, hacer controles capilares, manipulación de sondas uretrales, administración de antialérgicos, administración de medicamentos vía rectal, entre otros. Todo alumno o alumna tiene derecho a recibir una atención sanitaria continuada y de calidad que proteja su salud (tanto en casos de inmediatez como a nivel preventivo con visión corto-medio-largo plazo). ¡¿Pero cómo se puede cumplir este derecho fundamental si no existe una figura médica profesional (enfermeras o enfermeros) en nuestros centros educativos que puedan atender las necesidades de las y los alumnos?! El incumplimiento de este derecho es especialmente sangrante cuando implica en la práctica la exclusión del sistema educativo con necesidades especiales y la correspondiente marginalidad social.
¿Que no hay dinero? ¡Basta de excusas! ¡Personal médico en todas las escuelas ya!
Ante esta situación, la respuesta del Departamentd’Educació ha sido escandalosa, apelando a “la falta de dinero para desplegar el decreto de escuela inclusiva” y se ha lavado las manos diciendo que “están trabajando para que haya un protocolo”, trasladando toda la responsabilidad y la presión de la atención sanitaria a los profesores y profesoras y a las familias.
Desde el Sindicato de Estudiantes queremos enviar toda nuestra solidaridad con la lucha de las familias afectadas por esta situación y al mismo tiempo denunciar que la falta de personal sanitario cualificado en nuestras escuelas forma parte de la realidad de precariedad que viven los centros educativos públicos en Catalunya. Bajo los gobiernos de CiU y JxSí, mientras se inflaba el gasto público para la educación concertada, el gasto por alumno se redujo un 20%, y la sanitaria un 27,5%. En 2012, Irene Rigau, en ese momento consellerad’Ensenyament, aprobó un recorte de un 33% de la financiación a las Escuelas 0-3 (que aún no ha sido revertido). En un momento donde la escuela pública se desangra, hospitales y CAPs están saturados por masivos despidos de trabajadores y trabajadoras y la pobreza infantil se sitúa en un 28,5%, es una auténtica vergüenza que el Govern de la Generalitat destine 30 millones de euros al año para financiar a las 16 escuelas vinculadas al Opus Dei en Catalunya. Sí que hay dinero, pero no se quieren invertir para satisfacer las necesidades de la mayoría, de los y las estudiantes, de los trabajadores y las trabajadoras, padres y madres, profesores y profesoras que luchan por unos centros educativos dignos.
Exigimos al govern de la Generalitat, al Conseller d’Educació Josep Bargalló y a la Consellera de Salut Alba Vergés que dejen de mirar hacia otro lado y abandonen las declaraciones y palabras simbólicas. No queremos protocolos que sean papel mojado. Exigimos la contratación inmediata de personal sanitario cualificado en aquellas escuelas e institutos que indiquen las familias que tienen hijos e hijas con necesidades especiales y la puesta en marcha inmediata de una red de enfermería escolar pública y de calidad que implique la incorporación de una enfermera o enfermero en la plantilla de todos los centros públicos. Desde el Sindicato de Estudiantes sabemos que la única forma de conseguir nuestras reivindicaciones es extendiendo la solidaridad y la presión por abajo. De la misma forma que cuando hemos tomado las calles contra los recortes que pretenden destruir la educación pública, no pararemos hasta frenar las políticas de derechas y antisociales del gobierno de Quim Torra.
Firma el Change.org contra la exclusión y por una enfermería escolar digna