El Ayuntamiento recorta en un 15% el dinero destinado a este capítulo y se verán afectados los servicios de limpieza viaria, los jardineros, limpieza de edificios y locales, ayuda a domicilio, etc.
Por su parte la Comunidad de Madrid (CAM), va a recortar 40 millones de euros en el sector educativo. No contenta con esto, el Gobierno de Esperanza Aguirre va a aplicar un recorte del 5% a los salarios de los trabajadores de empresas públicas dependientes de la CAM: TeleMadrid, Canal Isabel II, Mintra (servicio de infraestructuras del transporte) y Metro, entre otros.
En total se verán afectados más de 40 mil trabajadores por estos
recortes.
La respuesta de los trabajadores no se ha hecho esperar. Los primeros en
saltar a la lucha han sido los recogedores de basura que se sumaron
como un solo hombre a la convocatoria de huelga indefinida a partir del
21 de junio, hecha por los sindicatos CCOO, UGT y CGT. Bastó la sola
convocatoria y la unanimidad de los trabajadores para que la empresa
retirara la parte más importante de su ataque antes de que la huelga
empezara., el despido de 120 trabajadores.
28-29-30 de junio huelga de metro
Ahora son los trabajadores de metro los que van a salir a la huelga los días 28, 29 y 30 de junio, por el recorte salarial, que supone, además, la ruptura del convenio colectivo firmado con los sindicatos en 2009 y que tiene vigencia hasta 2012.
Para los trabajadores de metro estas medidas es una fuerte lluvia sobre mojado ya que han sido un sector especialmente castigado en los últimos años.La red de metro se ha incrementado en los últimos 15 años un 80% si tenemos en cuenta el aumento de estaciones y un 136% si lo que consideramos son los kilómetros.
Sin embargo en el mismo período el número de trabajadores ha aumentado solo en un 31%. La consecuencia real es una disminución drástica de la plantilla con el consiguiente incremento de la carga de trabajo y el empeoramiento del servicio. Estaciones sin personal y mantenimiento deficiente tanto de la red como de los trenes que hace que las averías, los fallos eléctricos, los parones, etc, aumenten día a día, provocando en definitiva un empeoramiento paulatino del servicio, aunque esto no impide al Gobierno regional aumentar constantemente el precio de los billetes.
Con este punto de partida, la CAM pretende imponer un recorte salarial
del 5% a los trabajadores. La huelga está totalmente justificada y desde
el Sindicato de Estudiantes y el Militante queremos manifestar nuestro
más firme apoyo a esta acción.
Los servicios mínimos, un ataque al derecho a huelga
Consideramos totalmente justificada la decisión adoptada por los
trabajadores en las asambleas realizadas de no respetar los servicios
mínimos impuestos por la CAM los días 29 y 30. Los sindicatos explican
esta decisión argumentando que si la Asamblea de Madrid aprueba el día
28 (jornada en la que si se respetarán los servicios mínimos) incumplir
el convenio de metro, los trabajadores también tienen derecho a no
cumplir los servicios mínimos los demás días de huelga convocados por
ahora.
El cinismo del Gobierno de la CAM no tiene límites, eso es evidente,
pero desde nuestro punto de vista la cuestión de los servicios mínimos
tiene mucho más calado.
La huelga es el último recurso al que los trabajadores podemos recurrir
para defender nuestros derechos o como en este caso defendernos de un
atropello como el que ahora quieren cometer con los trabajadores de
metro.
El arma de la huelga nunca la empleamos los trabajadores de forma
frívola e irresponsable, recurrimos a ella cuando no hay otra
alternativa y su fuerza consiste en el efecto real que tiene la
paralización de la actividad que realizamos. El objetivo de la CAM
imponiendo servicios mínimos, como siempre abusivos, es el de romper la
huelga limitar su efecto y por tanto su fuerza con el objetivo de
doblegar a los trabajadores. ¡Reconocen formalmente el derecho a huelga,
pero lo impiden en la práctica! Vierten lágrimas de cocodrilo sobre los
derechos de los usuarios, cuando como hemos visto, es su política la
que realmente está empeorando notablemente el servicio sin importarles
lo más mínimo la repercusión que esta tiene en los cientos de miles
trabajadores que usamos este medio de transporte.
Los trabajadores y los jóvenes de Madrid lo tenemos claro, el único
responsable de esta huelga, de que el metro vaya a estar paralizado y
tengamos que acudir a medios alternativos para acudir a nuestro trabajo,
es el Gobierno de la CAM y contra el dirigiremos nuestra indignación,
apoyando a los trabajadores de metro en sus justas reivindicaciones.
Aunque muchos trabajadores tenemos claro esta cuestión, es evidente que
una de las claves para el triunfo en esta lucha está en conseguir
convencer de estos planteamientos a una mayoría decisiva de trabajadores
y ciudadanos en general. La CAM ya ha iniciado una campaña histérica
para desprestigiar a los trabajadores de metro, tildándolos de
irresponsables, insolidarios, de trabajadores privilegiados, etc.
Vertirán todo tipo de mentiras y calumnias contra los huelguistas y para
ello contarán con la complicidad de los medios de comunicación (radio,
prensa, televisión, etc), por ello los trabajadores necesitaremos
contrarrestar esta campaña inundando Madrid de panfletos explicando las
causas de nuestra lucha, nuestra situación laboral y lo que supondrán
los recortes que están aplicando tanto el Ayuntamiento como la CAM de
retroceso en la calidad de vida de los madrileños. Organizar estos
repartos consideramos que es una tarea vital para conseguir los
objetivos de la lucha.
Datos para desenmascarar el cinismo de los responsables de metro existen a toneladas. Pongamos algunos ejemplos: El último estudio sobre la opinión que de metro tienen los usuarios costó 76 mil euros, solo en el mes de junio de este año metro ha licitado con empresas (las más beneficiadas son El Corte Inglés, Acciona y Sacry), contratos por valor de más de 7 millones de euros, etc, la lista de despropósitos sería casi infinita.
Las empresas públicas, con la gestión del PP están siendo una vía a
través de la cual año tras año se regalan miles de millones de euros a
los empresarios por servicios que podrían ser prestados por empresas
públicas a un coste mucho menor. Y estos elementos culpan del déficit a
las condiciones salariales de los trabajadores, su desfachatez no tiene
límites.
Es necesario la unificación de la lucha de todos los sectores afectados
por los recortes
Los ataque que estamos sufriendo los trabajadores tanto desde el
Gobierno central, el de la CAM, los ayuntamientos y en las empresas, se
presentan como algo inevitable a lo que nos tenemos que resignar debido a
la crisis económica. Estas ideas provienen fundamentalmente de los que
durante la época de las vacas gordas han hecho suculentos negocios
también a costa de los trabajadores y nuestros derechos y ahora quieren
seguir amasando grandes beneficios a costa de echar todo el peso de la
crisis sobre nuestras espaldas.
Los trabajadores debemos rechazar contundentemente esta argumentación.
La crisis económica que estamos viviendo y que principalmente estamos
sufriendo los trabajadores, no es ningún castigo divino ni está
provocada por oscuras fuerzas sobrenaturales, tiene nombres y apellidos
muy concretos.
Estamos sufriendo las consecuencias de la crisis del sistema
capitalista, un sistema injusto, caduco, que ya hace mucho tiempo
debería encontrarse en el basurero de la historia.
Es falso que no haya recursos ¡cuando se trata de regalar dinero a los banqueros y empresarios siempre hay dinero, sin embargo este desaparece cuando se trata de garantizar unos servicios públicos de calidad unas condiciones dignas de trabajo! ¡Basta de engaños y mentiras!
Los trabajadores debemos luchar contra el recorte de servicios, contra
la pérdida de empleo y la reducción salarial, las necesidades no dejan
de crecer y por tanto lejos de reducir las plantillas y el presupuesto
de los servicios sociales, hay que aumentarlos considerablemente.
Hoy somos en Madrid decenas de miles los que estamos afectados por los
recortes del Ayuntamiento y del Gobierno de la CAM. Como hemos visto ya
hay sectores que han salido a la huelga. Desde nuestro punto de vista el
camino para parar estos ataques no pasa porque cada sector se enfrente a
ellos en solitario; esta estrategia permite al PP de Madrid desactivar
sectores o centrar fuerzas en otros a los que considere emblemáticos y a
los que le convenga infligir una derrota por el efecto negativo que
esta pudiera tener en el resto de los trabajadores (como puede ser el
caso de metro); en definitiva permite a la derecha llevar la iniciativa.