Los estudiantes y trabajadores que utilizamos el transporte público observamos desde hace tiempo como cada vez la espera del bus se hace más larga en las paradas. Los conductores ven los autobuses llenarse. En las cocheras, sin embargo, quedan autobuses sin usar. Como organización de estudiantes Sevilla usuarios del transporte público y futuros trabajadores, el Sindicato de Estudiantes apoya la lucha de la plantilla de Tussam.

¿Por qué la dirección de la empresa recorta las líneas?

Los autobuses que no se utilizan corresponden a los que deberían de conducir los 88 trabajadores que han sido despedidos, por eso hay una reducción de entre 30 y 40 vehículos en la ciudad. La dirección de la empresa dice que no hay suficiente dinero para pagar a los trabajadores, que se debe a la preocupante situación financiera de Tussam. Varias veces se ha hablado de privatización, y estos despidos, si no los detenemos a tiempo, serán el inicio de una ofensiva mayor sobre las condiciones laborales de los trabajadores y un empeoramiento del servicio.

¿Es motivo la deuda para privatizar y despedir? ¿Quién es responsable de la deuda?

La deuda es una excusa para reducir y luego privatizar las líneas. Tussam es una empresa pública que está para ofrecer un servicio eficaz a los jóvenes y trabajadores que utilizamos el autobús. Por otra parte, la excusa no nos vale ya que los altos cargos cobran hasta 120.000€ anuales. A los trabajadores, por el contrario, los expulsan de la empresa, y con el resto de la plantilla, acumulan una deuda que alcanza los 750.000€ en salarios. Parece ser que la que los periódicos llaman “insolvencia” de la empresa afecta solamente a los trabajadores y no a los altos cargos. La dirección de la empresa es la única responsable de la gran deuda acumulada estos años, y esto no se soluciona destruyendo puestos de trabajo o empeorando las condiciones de los mismos. Esto se soluciona metiendo en la empresa más recursos, en lugar de dárselo a los bancos y directivos.

Lo que tenemos que defender

Por ello, los usuarios estudiantes y trabajadores debemos ponernos del lado de los empleados de Tussam en su lucha contra la privatización. La privatización traerá, inevitablemente, un aumento del desempleo y la precariedad laboral en Sevilla, un empeoramiento del servicio. No podemos permitir que un puñado de empresarios se apodere de los transportes público. Es necesario restablecer líneas como la que llevaba a la Universidad Pablo de Olavide y esto puede hacerse reincorporando a los conductores que en su día superaron la oposición para poder trabajar en Tussam. Es necesario que los dirigentes del PSOE escuchen a los trabajadores y realicen una política de izquierdas a favor de la clase obrera (trabajadores y usuarios) garantizando que la empresa sea pública y de calidad. Los directivos deberían ser elegidos, controlados y revocables por los trabajadores, como uno más, para asegurar que no vuelvan a producirse abusos por parte de la empresa y se asegure el buen funcionamiento de un bien público como es Tussam.

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