El Gobierno del PP lleva más de cuatro años atacando las condiciones de vida del conjunto de los trabajadores y de los jóvenes. Su política se ha caracterizado por aumentar los beneficios de los empresarios a costa de la mayoría de la sociedad. Los beneficios de la banca y de las grandes empresas se incrementan año tras año. Por ejemplo, mientras que los beneficios de Repsol han aumentado en el primer semestre de este año un escandaloso 380% respecto al mismo periodo del año anterior, el subsidio de desempleo, hoy, llega a menos hogares, el Salario Mínimo sigue siendo una miseria y los recortes en los gastos sociales son la tónica dominante, de hecho España es uno de los países de la UE que menos dinero dedica con un 21’6% en el 98 cuando la media europea es del 27’7% del PIB. Y esto en un contexto en el que la economía ha crecido, en el que "España va bien", ¿qué pasará cuando esta situación económica cambie?
La contrarreforma del mercado laboral que se llevó a cabo en el 97, con la excusa de terminar con la precariedad y la temporalidad del empleo, sólo ha significado abaratar el despido y empeorar la situación laboral en las empresas. Hoy, tres años después, el balance es claro: la temporalidad sigue por encima del 30%. Pero los ataques no han terminado. Con la mayoría absoluta en las últimas elecciones el PP está más envalentonado y va a tratar de llevar a cabo todos los ataques que no pudo realizar en la anterior legislatura. Para la burguesía todo lo hecho hasta ahora no es suficiente, para seguir manteniendo sus beneficios necesitan explotar más y más a los trabajadores. Están preparando una nueva contrarreforma laboral más salvaje, las declaraciones del Ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, en El País del 25 de octubre no tienen desperdicio: "es necesario no predisponer a los trabajadores jóvenes en contra de los de más edad, haciéndoles pensar que sólo la eliminación física de los más antiguos les va a permitir tener un empleo". Su solución no es la creación de empleo sino igualar las condiciones de trabajo a la baja, para ello anuncian el abaratamiento del despido procedente a 33 días por año trabajado a todos los nuevos contratos fijos. Quieren el despido gratuito y menos derechos laborales. Así cuando lleguen las vacas flacas podrán despedir a millones de trabajadores sin gastarse un duro.
EN DEFENSA DE LA EDUCACIÓN PÚBLICA
Uno de los sectores más atacados en los últimos años es el educativo. La política del PP ha consistido en el acoso y derribo de la enseñanza pública y en aumentar las subvenciones a los empresarios de la enseñanza privada. Mientras que en 1999 el aumento del presupuesto para la enseñanza pública fue de un 6%, el de la privada concertada aumentó un escandaloso 15´3%. El gasto público en educación está por debajo del que había antes de que el PP llegara al Gobierno. Esta es su política. El Sindicato de Estudiantes ha luchado decididamente contra la privatización de la enseñanza pública y el recorte de los derechos democráticos a los jóvenes a lo largo de estos cuatros años con varias Huelgas Generales. El curso pasado conseguimos que el Ministerio de Educación tuviera que echar atrás un decreto ya aprobado que endurecía la prueba de acceso a la universidad, la famosa selectividad. Fue la movilización decidida y estatal la que nos permitió conseguir esta victoria frente a la derecha. Ahora, quieren modificar completamente la estructura del sistema educativo para la primavera del 2001 de forma totalmente reaccionaria. El Sindicato de Estudiantes hemos hecho un llamamiento a los dirigentes sindicales de CCOO, UGT y CEAPA para la convocatoria de una Huelga General de toda la Comunidad Educativa en el 2º trimestre de curso para frenar este nuevo ataque de la derecha.
HAY QUE PREPARAR UNA HUELGA GENERAL CONTRA LA POLÍTICA DEL PP
Siempre hemos explicado que la lucha de los trabajadores es nuestra lucha. Si hoy estudiamos es para poder trabajar mañana. Por eso el Sindicato de Estudiantes apoya esta huelga y hacemos un llamamiento a todos los estudiantes a acudir a las distintas manifestaciones convocadas para el miércoles 13 por la tarde y a no asistir a clase el día 14, día en que los profesores estarán en huelga por la mejora de sus condiciones de trabajo y en defensa del sector público.
Pero esta huelga no puede quedarse ahí. Tiene que ser el primer paso para la organización y convocatoria de una Huelga General contra la política reaccionaria del PP. En el 96 tras una movilización masiva de los funcionarios, una marcha a Madrid y una huelga masiva, los dirigentes sindicales de CCOO y UGT no le dieron continuidad. La política sindical llevada a cabo durante estos cuatro años ha puesto de manifiesto sus limitaciones. La debilidad invita a la agresión, la negociaciación por la negociación, sin utilizar la fuerza de los trabajadores en la calle lo único que consigue es que la derecha lo tenga más fácil para atacarnos. Es hora de pasar a la ofensiva. Por eso esta huelga tiene que ser un primer paso para la organización de una huelga general contra la derecha. Este es el camino para conseguir nuestra reivindicaciones.
¡En defensa del sector público. Por una enseñanza pública de calidad!
¡Frenemos la precariedad laboral!
¡Por un puesto de trabajo digno al terminar de estudiar!