Acto Público: “En Madrid por el derecho a decidir”

Domingo 17 de septiembre a las 12h en el teatro del barrio

La prohibición de un acto en Madrid sobre el referéndum del 1-O en Catalunya por parte del juez José Yusty Bastarreche constituye un ataque sin precedentes contra la libertad de expresión, similar a los que se producían cotidianamente hace 40 años bajo la dictadura franquista. La sentencia prohíbe el acto alegando que “atenta directa, clara y gravemente contra la unidad de España”. Los argumentos del fallo judicial no sólo cuestionan frontalmente el derecho a la libertad de expresión, sino que ponen de relieve el carácter profundamente reaccionario del aparato del Estado español, la existencia de amplios sectores de la judicatura dominados por elementos fascistas, y señala que la escalada represiva contra los derechos democráticos se ha convertido en uno de los ejes fundamentales de la política de Rajoy.

 

El escándalo es mayúsculo, pues un juez de Madrid ha prohibido un acto político a favor del derecho a decidir, justo cuando el pasado 11 de septiembre más de un millón de personas se manifestaban en Barcelona demandando ese mismo derecho. Esta es una de las consecuencias inevitables de la ofensiva represiva contra el pueblo de Catalunya y sus derechos, alentada por el PP y respaldada desde Ciudadanos y la dirección del PSOE.

La izquierda combativa no puede permanecer con los brazos cruzados ante una decisión que sienta un precedente extremadamente peligroso para los derechos de los trabajadores, la juventud y las naciones oprimidas. Además de impulsar la denuncia periodística es necesaria la movilización en las calles, ligando este atentado a la libertad de expresión con la defensa que asiste al pueblo de Catalunya para ejercer su derecho inalienable a la autodeterminación. El conjunto de las organizaciones de la izquierda que lucha, movimientos sociales, sindicatos, asociaciones de vecinos, etc… debemos alzar la voz con contundencia. No podemos permitir que el PP prohíba actos porque no les gusta que discutamos y defendamos determinada ideas y propuestas. Se trata de un intento burdo de callarnos y que no podamos opinar, hoy respecto al derecho a decidir y mañana respecto a cualquier otra cuestión.

Evidentemente este hecho es consecuencia directa de un sistema judicial copado por el antiguo aparato franquista. El juez que ha prohibido el acto tiene una marcada ideología ultraderechista, como lo prueba que anteriormente atacara la ley de la Memoria Histórica, o firmara un rancio manifiesto contra el “secesionismo”, además de insultar a Carmena por su “aspecto”. Al tiempo que este tipo de elementos prohíben actos de izquierdas y atacan a activistas y movimientos sociales, los tribunales, la policía y las instituciones del Estado permiten que grupos de extrema derecha campen a sus anchas celebrando la dictadura franquista y homenajeando a dictadores, e incluso garantizando subvenciones públicas a organizaciones como la Fundación Francisco Franco.

Desde el Sindicato de Estudiantes e Izquierda Revolucionaria creemos que no podemos aceptar ni permitir esta situación. El Ayuntamiento de Madrid debe además desobedecer esa decisión, propia de un juez de un estado totalitario, y permitir que dicho acto se celebre en la Nave de Terneras del Matadero, dando apoyo público y logístico a los organizadores y asistentes. No se puede aceptar una decisión judicial de este tipo, al igual que no se podría aceptar una decisión judicial que prohibiera a un periódico criticar la corrupción o que prohibiera a cualquier persona criticar la Constitución o al Gobierno. Si hoy se acepta que pasen por buenas decisiones de este tipo, mañana cualquiera podría verse amenazado, prohibiéndose actos por defender una sociedad socialista, por defender la expropiación de la banca o las eléctricas, por resistir y luchar contra los desahucios, o por cualquier otra cuestión que el PP y el aparato judicial consideren, según su criterio, que atentan contra su “orden constitucional”.

¡Defendamos nuestros derechos democráticos!

¡Fuera el PP! ¡Fuera los jueces franquistas!