Desde el Sindicato de Estudiantes mostramos nuestra solidaridad con las diecinueve trabajadoras de la fotocopiadora de las universidades de Oviedo, Gijón y Mieres, que están amenazadas de despido y serán sustituidas por fotocopiadoras-monedero sin personal. Esta medida supondrá un gran detrimento en la calidad del servicio de fotocopiadora tanto para los alumnos como para los profesores mientras que permitirá al dueño de la empresa abaratar más costes sin tener que preocuparse por ofrecer unas condiciones mínimas a sus trabajadoras.
Esto no es ninguna casualidad. Precisamente el servicio de la reprografía, como ya es práctica habitual en muchas universidades y en muchos otros servicios diferentes, está en manos privadas. Así la búsqueda del lucro por encima de un servicio de calidad para los usuarios o unas condiciones dignas para los empleados son la norma en casos como este y por eso asistimos a este ataque tan escandaloso a las trabajadoras que pretende acabar con sus puestos de trabajo.
Cada día más sectores de la Universidad están siendo afectados por las privatizaciones. Con los recortes del Gobierno en los presupuestos y las nuevas medidas que se proponen para el ámbito educativo, se busca que las universidades abran sus puertas a las empresas privadas, un camino que encaja completamente con las intenciones de aquellos que pretenden convertir la educación en un jugoso negocio en vez de entenderlo como un derecho. El Partido Popular, con la enorme fidelidad que le caracteriza hacia los banqueros y grandes empresarios de este país ya está poniendo en práctica estos planes y los hijos de los trabajadores estamos sufriendo sus consecuencias: el aumento desorbitado de las tasas o la reducción de las becas buscan que la Universidad se convierta en un centro exclusivo para los que se lo pueden pagar, mientras los hijos de los trabajadores no podremos acceder a una Universidad pública y de calidad, teniendo que conformarnos a ser mano de obra barata para los capitalistas.
Por todo ello, desde el Sindicato de Estudiantes, exigimos que se mantengan los puestos de trabajo de las trabajadoras del servicio de reprografía. También exigimos la recuperación como servicio público integrado en la Universidad. Y también exigimos que se pare la política de recortes, no sólo en la Universidad de Oviedo, sino en el conjunto de la educación pública.
NI UN DESPIDO EN EL SERVICIO DE REPROGRAFÍA.
NO A LOS RECORTES EN EDUCACIÓN
POR UNA UNIVERSIDAD PÚBLICA Y DE CALIDAD.