¡Fuera la policía de los centros de estudio!
Ayer, 3 de septiembre, en el Col-legi Públic Ciutat de Cremona, de Alaquàs (València), se produjo un hecho gravísimo. La Generalitat de Alberto Fabra, y el delegado del Gobierno de Rajoy, echaron mano del único argumento todavía a su disposición para intentar parar la movilización en su contra: la policía nacional.
Un numeroso grupo de padres del colegio, apoyados por sindicalistas y por el Sindicat d’Estudiants, acompañó a los nueve niños cuya escolarización en el Cremona impide la Conselleria. La lucha de la comunidad del Cremona contra la eliminación de la última línea que queda, es decir, contra la desaparición del centro, es un referente para el movimiento educativo del País Valenciano y de todo el Estado. Las madres, padres y docentes aprobaron en junio ignorar la decisión arbitraria, injusta y antidemocrática de la Conselleria, que haciendo caso omiso de ellos y del Consell Escolar Municipal impuso la escolarización de esos nueve niños en otro colegio, separándolos así de sus hermanos.
La determinación de los miembros de Tots Som Cremona es clara: no pararán hasta garantizar la pervivencia del centro. Ante esta decisión, Alberto Fabra y suconsellera Mª José Català han tenido la desvergüenza de presionar a la directora para que expulsara del centro a los nueve niños y de utilizar la Policía Nacional para expulsar también a los padres. También fueron expulsados los seis maestros en paro que se ofrecieron para atender gratuitamente a los nuevos alumnos.
Los dirigentes corruptos del PP han demostrado ya muchas veces no tener ningún tipo de escrúpulos en la utilización de la represión, pero la entrada de la policía en un colegio público es un jalón en su trayectoria reaccionaria. Si creen que nos van a amedrentar lo tienen claro: no lo pudieron hacer en la primavera valenciana y no lo van a hacer ahora.
Más que nunca, es imprescindible que todo el movimiento se exprese en apoyo al Cremona, organizando una extensa campaña de solidaridad. Los sindicatos han declarado su solidaridad con el colectivo, es el momento de ir más allá. Proponemos al STEPV, a CCOO, a UGT, a FAPA-València, a la Plataforma per l’Ensenyament Públic, a las diferentes plataformas, a concretar ya un calendario de asambleas centro por centro, y a nivel de cada localidad, a votar resoluciones de apoyo al Cremona, a convocar una primera manifestación, que también incluya todas las reivindicaciones de defensa de la educación pública, y a convertir la huelga convocada en todo el estado por el Sindicato de Estudiantes los días 21, 22 y 23 de octubre en una huelga general de toda la comunidad educativa.
¡Fuera la policía de los centros de estudio! ¡Solidaridad con el Cremona!
¡Escolarización inmediata y en todas sus condiciones de los nueve niños del Cremona! Plan para acabar con sus barracones en un año.
¡Basta ya de eliminación de líneas y unidades en la red pública!
¡Eliminación de todos los recortes impuestos a la educación pública! Nosotros no pagamos su crisis…
¡Por una campaña de solidaridad con el Cremona! ¡Asambleas conjuntas y en todos los centros y localidades!
La LOMCE, ¡no pasará!