5000 estudiantes nos manifestamos contra la Mafia
¡Dimisión inmediata del Rector Javier Ramos!

El pasado 27 de septiembre, los estudiantes de la URJC respondimos con una gran concentración a la mafia de esta universidad, implicada en toda clase de escándalos de corrupción que culminaron con el regalo de másteres a la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, al actual presidente del Partido Popular, Pablo Casado, y a la ya exministra de Sanidad Carmen Montón, y en el escandaloso desfalco de miles de euros de dinero público a través del Instituto de Derecho Público.

 

No es de extrañar que la URJC sea el epicentro de todos estos escándalos. La privatización de la universidad pública llevada a cabo por los sucesivos gobiernos del Partido Popular en la Comunidad de Madrid ha tenido en esta universidad su principal laboratorio, siendo aquí donde más lejos llegó este proceso de privatización. Aunque también es necesario recordar que toda esta deriva de privatizaciones y recortes, y la pérdida de democracia en la universidad, comenzó mucho antes con la aplicación de los planes de Bolonia por parte del gobierno del PSOE.

Desde el Sindicato de Estudiantes nos sumamos a la convocatoria de huelga del pasado 27 de septiembre, repartiendo miles de hojas entre nuestros compañeros y compañeras, llamando a participar activamente, y explicando la necesidad de organizarnos para proteger la universidad pública de aquellos que solo ven un negocio en ella con el que lucrarse. Nuestras exigencias han sido claras desde el principio. En primer lugar, la expulsión fulminante de todos aquellos que, por activa o por pasiva, consintieron esta situación, comenzando por el actual rector Javier Ramos. La formación inmediata de una comisión democrática formada por estudiantes y trabajadores de la universidad para depurar todas las responsabilidades de esta trama corrupta que ha actuado durante años con impunidad, y por último, la dimisión de aquellos políticos que se han beneficiado de la misma, comenzando por Pablo Casado.

Podemos acabar con la mafia

Los y las estudiantes de la universidad hemos dado una formidable muestra de fortaleza, señalando el camino de cara a derrotar a la mafia de la URJC y expulsarla para siempre de nuestra universidad y defendiendo una Universidad pública accesible y de calidad. ¡Las maniobras del Rectorado para eludir su responsabilidad no nos engañan! Exigimos la dimisión inmediata de todos y todas las implicadas en esta trama de corrupción.

Para ello es necesario continuar la lucha y continuar organizándonos de cara a recuperar nuestra universidad. Podemos además inspirar a estudiantes de muchas otras universidades señalando que el problema no está aislado en la URJC, sino que el problema es un modelo de universidad basado en la privatización y la elitización que solo busca convertir la educación universitaria en un lucrativo negocio. El siguiente paso debe ser el de organizarnos más y mejor en todos los campus y continuar la presión hasta que se cumplan nuestras reivindicaciones.

¡Basta ya de hacer negocios con la universidad!
¡Únete al Sindicato de Estudiantes!