El rectorado de la Universidad Complutense de Madrid propone un plan de recortes para reducir la universidad a la mitad
¡Basta ya de ataques a la UCM! ¡Ni recortes ni privatización!
¡Universidad pública, gratuita y de calidad!
El rectorado de la Universidad Complutense de Madrid, dirigido por Carlos Andradas, ha hecho público su deseo de poner en marcha un plan de recortes y aprobarlo el próximo mes de octubre. De llevarse a cabo este plan de “restructuración” los efectos en la universidad serán devastadores.
Con la excusa de buscar una mayor “eficiencia” económica, entre otras, este plan quiere reducir nada más y nada menos que el 60% de los actuales departamentos, pasando de 185 departamentos a 72. Esta fusión provocaría la creación de macrodepartamentos de más de 100 profesores en facultades como Derecho o Medicina, perjudicando a la calidad de la educación. Por supuesto, este plan tendrá también graves consecuencias, no sólo para los estudiantes sino también para los profesores y trabajadores de la universidad, que sufrirán despidos, masificación y empeoramiento en sus condiciones laborales, además de ser un paso de gigante hacia la fusión directa de centros, una de las reformas que quería llevar adelante el Gobierno del Partido Popular. La UCM ha perdido en los últimos años más de 400 profesores por jubilaciones y fin de becas orientadas al apoyo departamental y se espera que próximamente se jubilen otros 100 profesores más. La fusión de departamentos, lejos de la retórica de ahorro del gasto va a suponer de hecho utilizar a profesores de otros departamentos para reforzar asignaturas con cierto grado de afinidad en vez de contratar a profesores especializados que es lo más necesario para garantizar la calidad de estas materias. Si alguien pretende convencernos de que esto es un avance para la calidad de la Universidad, es que nos toma por tontos.
La UCM a la cabeza de los planes de recortes a la pública en todo el Estado
Pero este no es el único plan que el rector Andradas ha liderado para seguir recortando en la UCM. Hace unos meses se aprobó de forma completamente clandestina y a espaldas de todo el mundo una batería de medidas que consistían en abrir de par en par las puertas de la UCM a la empresa privada. Estas medidas suponían la puesta en venta de la universidad a intereses privados, entregándoles toda una serie de privilegios a empresas que sólo buscan el negocio en vez de la calidad de la enseñanza: entregándoles el poder de decisión sobre los Planes de Estudio, la creación de titulaciones, la contratación de profesores o la privatización de las patentes que surjan de los proyectos de investigación en los que estas empresas participen, el poder de asignar becas y ayudas a estudiantes bajo sus propios criterios y condiciones: una auténtica dictadura de la empresa privada que, a golpe de talonario, gobierna la universidad y donde los estudiantes y los trabajadores no tendremos ni voz ni voto.
Parece que el programa “en defensa de la universidad pública” con el que Andradas llegó al rectorado de la UCM era pura ficción. En lo que lleva al frente del rectorado no ha hecho otra cosa que plegarse por completo a la lógica de los recortes y los ataques a la pública que la derecha, los grandes empresarios y las élites económicas quieren imponernos a la mayoría. Nosotros tenemos que ser claros y es que sí que hay alternativa a los recortes y la austeridad. Todos los días desayunamos con escándalos de corrupción de quienes impulsan estas medidas, como el reciente escándalo de los Papeles de Panamá. También hemos visto cómo se utilizaba el dinero público, el dinero de todos para rescatar bancos y para sufragar las amnistías fiscales a multimillonarios que viven a cuerpo de rey mientras los demás pagamos los platos rotos. Por eso decimos que no es verdad que no hay dinero ¡Claro que hay dinero! ¡Pero lo tienen los de siempre! La solución no es que la empresa privada se haga con el control de las universidades, la solución no es la fusión de departamentos ni los despidos, ni el cierre de facultades. La solución no es la subida de las tasas ni aplicar reformas como el 3+2 que expulsarán a miles y miles de estudiantes de la universidad por no tener dinero. La solución es la lucha y la movilización en defensa de nuestros derechos, en defensa de la educación para los hijos de los trabajadores, en defensa de una universidad pública, gratuita y de calidad.
¡Organízate para luchar! ¡Únete al Sindicato de Estudiantes!
Los defraudadores de impuestos, banqueros y empresarios, quieren la Universidad sólo para los hijos de las élites o para quienes acepten endeudarse de por vida y enriquecer de paso a los miserables de siempre pero no se lo vamos a permitir. Desde el Sindicato de Estudiantes exigimos la retirada de las medidas para la privatización de la UCM, la fusión de departamentos de la UCM y la derogación inmediata de la LOMCE y el 3+2 y llamamos a todos los estudiantes a organizarse con nosotros para continuar la lucha en las calles.
¡La universidad pública no se vende, se defiende!