En la madrugada del 6 de septiembre, dos compañeros del Sindicato de Estudiantes de Tres Cantos, de 15 y 16 años, fueron agredidos por un grupo de fascistas mientras se encontraban charlando con otros amigos en uno de los lugares comunes donde nos reunimos los jóvenes del pueblo. Al grito de “punkis de mierda, dais asco” y “rojos de mierda, os vamos a matar”, el principal agresor, mayor de edad, propinó un puñetazo en la mandíbula a nuestro compañero y lo tiró al suelo. El otro compañero, viendo la situación en la que se encontraba su amigo, acudió a socorrerle para sacarle del círculo y también fue empujado y arrastrado por el suelo. Aunque al final consiguieron escapar, los dos compañeros acabaron con diferentes contusiones por su cuerpo, como señala el parte de lesiones tras pasar por el ambulatorio.
Las bandas fascistas son los perros de presa de los grandes capitalistas. Este hecho, que puede parecer una agresión puntual, ocurre en un momento en el que estas bandas, ante el clima de movilización social y gracias a la total impunidad de la que gozan, han aumentado sus agresiones con el objetivo de amedrentar a los jóvenes de izquierdas que luchamos por nuestros derechos. Durante esta semana, hemos podido ver cómo los fascistas que han “ocupado” un edificio en el barrio obrero de Tetuán, agredían a jóvenes y trabajadores migrantes o a activistas de la izquierda sin que el Ayuntamiento o la Delegación de Gobierno hayan hecho absolutamente nada. Igualmente, durante los últimos meses hemos presenciado como estos mismos grupos intentaban atacar actos públicos en contra de los desahucios en la Universidad Autónoma de Madrid o intentaban reventar un acto de La Comuna, Presxs del Franquismo, en defensa de la escuela pública.
En Tres Cantos no es la primera vez que nos enfrentamos a agresiones de este tipo, que con la connivencia del gobierno municipal del PP que intenta presentar estas agresiones siempre como peleas entre bandas de ultraderecha y ultraizquierda. Pero la realidad es bien distinta, la agresión que vivieron los dos compañeros fue por el único motivo de ser jóvenes de izquierdas y luchar en defensa de la educación pública y por sus derechos.
Desde el Sindicato de Estudiantes queremos denunciar la total impunidad con la que gozan estos elementos y hacemos un llamamiento al conjunto de las organizaciones de de la izquierda en Tres Cantos para denunciar públicamente a los culpables. La única forma de acabar con las bandas fascistas es a través de la lucha organizada de los jóvenes y trabajadores.
¡Fuera fascistas de nuestros pueblos y barrios!
¡Madrid será la tumba del fascismo!