¡Ningún recorte a los gastos sociales! ¡Ningún recorte a la educación pública!
¡Que la crisis la paguen los capitalistas!
¡Que la crisis la paguen los capitalistas!
El gobierno del PSOE, que hasta hace bien poco nos decía que no recortaría los gastos sociales y no aplicaría ningún ataque contra los más débiles, ha lanzado hace unos días un plan salvaje de recortes sociales contra los trabajadores y los pensionistas que empeorará las condiciones de vida de cientos de miles de familias trabajadoras:
rebaja un 5% el sueldo de los trabajadores del sector público, congela
las pensiones en 2011 con la consiguiente pérdida del poder adquisitivo
para los jubilados, suprime la ayuda de 2.500 euros a las familias por
cada nuevo hijo, y reduce la inversión pública estatal en 6.450 millones
de euros. Estos ataques son el colofón a la reducción de los
presupuestos de la enseñanza pública, y a todas las medidas de
privatización y elitización, como el plan Bolonia, que los estudiantes
hemos sufrido en estos años.
Pero estos ataques no serán los últimos. El gobierno tiene previsto aprobar una reforma laboral que de llevarse a la práctica supondrá, entre otras muchas cosas, un empeoramiento en las condiciones laborales para los jóvenes y un abaratamiento del despido.
Sin embargo, estas medidas que van a afectar a trabajadores, parados y pensionistas, no afectan de ninguna manera a los banqueros y grandes empresarios, que son los verdaderos responsables de esta crisis. En tan solo tres meses Telefónica, Endesa, el BBVA y el Santander, que cotizan en bolsa, obtuvieron un beneficio superior a todo el ahorro previsto para este año con el plan de ajuste anunciado por el gobierno. En estos momentos la tercera partida más importante en los presupuestos generales del estado está destinada a pagar los intereses de la deuda, más de 22.000 millones de euros, que irán a parar fundamentalmente a manos de los banqueros, los mismos que han sido los causantes de la crisis y se han beneficiado del rescate millonario con los fondos públicos entregados por el gobierno del PSOE (más de 150.000 millones de euros en dos años). Esa es la verdadera causa del aumento de la deuda y del déficit público, y no el gasto social que se quiere recortar en detrimento de los trabajadores.
Pero estos ataques no serán los últimos. El gobierno tiene previsto aprobar una reforma laboral que de llevarse a la práctica supondrá, entre otras muchas cosas, un empeoramiento en las condiciones laborales para los jóvenes y un abaratamiento del despido.
Sin embargo, estas medidas que van a afectar a trabajadores, parados y pensionistas, no afectan de ninguna manera a los banqueros y grandes empresarios, que son los verdaderos responsables de esta crisis. En tan solo tres meses Telefónica, Endesa, el BBVA y el Santander, que cotizan en bolsa, obtuvieron un beneficio superior a todo el ahorro previsto para este año con el plan de ajuste anunciado por el gobierno. En estos momentos la tercera partida más importante en los presupuestos generales del estado está destinada a pagar los intereses de la deuda, más de 22.000 millones de euros, que irán a parar fundamentalmente a manos de los banqueros, los mismos que han sido los causantes de la crisis y se han beneficiado del rescate millonario con los fondos públicos entregados por el gobierno del PSOE (más de 150.000 millones de euros en dos años). Esa es la verdadera causa del aumento de la deuda y del déficit público, y no el gasto social que se quiere recortar en detrimento de los trabajadores.
Apoyamos la lucha de los profesores por una educación pública y unas
condiciones dignas. ¡El dinero público para gastos sociales, no para la
banca y las multinacionales!
En Euskadi los sindicatos ELA, LAB y STEE-EILAS han convocado una huelga
en la enseñanza pública para el 25 de mayo, contra la precarización de
las condiciones laborales de los profesores y los recortes en el
presupuesto de la educación pública que va a repercutir negativamente en
la calidad de la enseñanza, con aulas masificadas, falta de
profesorado, sustitutos, material, becas…etc.
Tras 30 años de ataques a la educación pública por parte del PNV y EA, que han posibilitado que hoy la red privada financiada con fondos públicos escolarice a más alumnos que la red pública, el gobierno de Patxi López sigue siendo rehén de sus pactos con el PP y continúa en la línea de más recortes, privatizaciones, y agresiones a los derechos democráticos y al euskera.
Desde Ikasle Sindikatua hacemos nuestras las reivindicaciones del profesorado y apoyamos la lucha del 25 de mayo defendiendo una escuela pública de calidad, gratuita, democrática, laica y científica. Pero además entendemos que esta movilización es parte de una lucha más amplia contra los recortes que quieren imponernos a la juventud y a los trabajadores tanto en Euskal Herria como en el resto del Estado.
¡Por la unidad de acción de todos los sindicatos! ¡Por una huelga general en todo el estado!
Tras el anuncio por parte de Zapatero de las medidas de ajuste, la mayoría sindical vasca ha decidido trasladar la convocatoria de huelga general en el sector público convocada por UGT y CCOO a nivel estatal para el próximo día 8 de junio, al día 25 de mayo coincidiendo con la huelga en la enseñanza pública.
Esta decisión de separar la lucha en días diferentes en Euskal Herria por parte de la mayoría sindical vasca, o entre el sector público y el resto de los trabajadores por parte de UGT y CCOO, no es el mejor camino para parar los ataques del gobierno. La división sindical debilita la respuesta de los trabajadores y la juventud, que debe ser lo más masiva y unitaria posible, y envalentona a la patronal y al gobierno. Si la burguesía, la UE y el FMI se unen para atacar a los trabajadores europeos ¿qué sentido tiene que nosotros nos dividamos a la hora de hacerles frente?
La convocatoria estatal de huelga en el sector público el 8 de junio es un paso adelante que Ikasle Sindikatua también apoya. Pero la movilización del 8 de junio, igual que la del 25 de mayo, tienen que convertirse en un escalón que prepare las fuerzas para dar una respuesta generalizada y unitaria de todos los sindicatos, de todos los sectores de trabajadores, ante la magnitud de los ataques que pretenden imponernos. Los dirigentes de CCOO y UGT tienen una gran responsabilidad en sus manos. Durante meses, con el argumento de que “no existían ataques”, cosa que no era cierta, han apostado por las concesiones al gobierno y la patronal para intentar capear el temporal. Una estrategia que les ha llevado a rechazar la organización de movilizaciones contundentes y masivas, y que se plasmó en su oposición a la huelga general organizada en Euskal Herria el 21 de Mayo de 2009 por parte de la mayoría sindical vasca, que Ikasle Sindikatua sí apoyamos activamente. Esta estrategia ha sido un error y, lejos de evitar ataques, ha envalentonado a los empresarios y a los banqueros. Es el momento de rectificar.
Necesitamos una alternativa de lucha que esté a la altura de los planes que queremos echar atrás. No estamos ante un ataque aislado. Todos los sectores y todos los derechos sociales de la clase obrera están amenazados. Ya sean los trabajadores del sector público o de la empresa privada, los parados, los pensionistas o los estudiantes que en poco tiempo tendremos que incorporarnos al mercado laboral…todos estamos afectados por esta crisis y los planes que el gobierno está aplicando. Esto exige una respuesta general, continuada en el tiempo y unitaria por parte de todos los sindicatos, que se exprese en una huelga general de 24 horas en todo el estado para obligar al gobierno de Zapatero a retroceder.
El ejemplo de los trabajadores y la juventud griega marcan el camino. ¡Somos fuertes y podemos ganar esta batalla! Incluso los sindicatos europeos deberían convocar una huelga general en toda Europa, ya que los planes de austeridad están afectando al conjunto de los países, empezando por Grecia, Portugal, Francia, Italia, etc.
Tras 30 años de ataques a la educación pública por parte del PNV y EA, que han posibilitado que hoy la red privada financiada con fondos públicos escolarice a más alumnos que la red pública, el gobierno de Patxi López sigue siendo rehén de sus pactos con el PP y continúa en la línea de más recortes, privatizaciones, y agresiones a los derechos democráticos y al euskera.
Desde Ikasle Sindikatua hacemos nuestras las reivindicaciones del profesorado y apoyamos la lucha del 25 de mayo defendiendo una escuela pública de calidad, gratuita, democrática, laica y científica. Pero además entendemos que esta movilización es parte de una lucha más amplia contra los recortes que quieren imponernos a la juventud y a los trabajadores tanto en Euskal Herria como en el resto del Estado.
¡Por la unidad de acción de todos los sindicatos! ¡Por una huelga general en todo el estado!
Tras el anuncio por parte de Zapatero de las medidas de ajuste, la mayoría sindical vasca ha decidido trasladar la convocatoria de huelga general en el sector público convocada por UGT y CCOO a nivel estatal para el próximo día 8 de junio, al día 25 de mayo coincidiendo con la huelga en la enseñanza pública.
Esta decisión de separar la lucha en días diferentes en Euskal Herria por parte de la mayoría sindical vasca, o entre el sector público y el resto de los trabajadores por parte de UGT y CCOO, no es el mejor camino para parar los ataques del gobierno. La división sindical debilita la respuesta de los trabajadores y la juventud, que debe ser lo más masiva y unitaria posible, y envalentona a la patronal y al gobierno. Si la burguesía, la UE y el FMI se unen para atacar a los trabajadores europeos ¿qué sentido tiene que nosotros nos dividamos a la hora de hacerles frente?
La convocatoria estatal de huelga en el sector público el 8 de junio es un paso adelante que Ikasle Sindikatua también apoya. Pero la movilización del 8 de junio, igual que la del 25 de mayo, tienen que convertirse en un escalón que prepare las fuerzas para dar una respuesta generalizada y unitaria de todos los sindicatos, de todos los sectores de trabajadores, ante la magnitud de los ataques que pretenden imponernos. Los dirigentes de CCOO y UGT tienen una gran responsabilidad en sus manos. Durante meses, con el argumento de que “no existían ataques”, cosa que no era cierta, han apostado por las concesiones al gobierno y la patronal para intentar capear el temporal. Una estrategia que les ha llevado a rechazar la organización de movilizaciones contundentes y masivas, y que se plasmó en su oposición a la huelga general organizada en Euskal Herria el 21 de Mayo de 2009 por parte de la mayoría sindical vasca, que Ikasle Sindikatua sí apoyamos activamente. Esta estrategia ha sido un error y, lejos de evitar ataques, ha envalentonado a los empresarios y a los banqueros. Es el momento de rectificar.
Necesitamos una alternativa de lucha que esté a la altura de los planes que queremos echar atrás. No estamos ante un ataque aislado. Todos los sectores y todos los derechos sociales de la clase obrera están amenazados. Ya sean los trabajadores del sector público o de la empresa privada, los parados, los pensionistas o los estudiantes que en poco tiempo tendremos que incorporarnos al mercado laboral…todos estamos afectados por esta crisis y los planes que el gobierno está aplicando. Esto exige una respuesta general, continuada en el tiempo y unitaria por parte de todos los sindicatos, que se exprese en una huelga general de 24 horas en todo el estado para obligar al gobierno de Zapatero a retroceder.
El ejemplo de los trabajadores y la juventud griega marcan el camino. ¡Somos fuertes y podemos ganar esta batalla! Incluso los sindicatos europeos deberían convocar una huelga general en toda Europa, ya que los planes de austeridad están afectando al conjunto de los países, empezando por Grecia, Portugal, Francia, Italia, etc.
Que la crisis la paguen los culpables: los capitalistas
La lucha de los trabajadores es nuestra lucha, mucho más cuando el desempleo juvenil solo en la CAPV es superior al 26,82% entre los menores de 25 años y una mayoría de los jóvenes que trabajan no cobran ni siquiera mil euros.
El sistema capitalista que nos condena al desempleo y la explotación, a salarios de miseria y contratos precarios, intenta criminalizar a la juventud a través de los medios de comunicación y de una campaña de propaganda permanente. Frente a todo ello, nosotros respondemos exigiendo nuestro derecho a una educación pública de calidad, científica, laica y democrática, y a un puesto de trabajo al finalizar los estudios, sin precariedad y sin salarios de miseria. ¡Queremos estudiar y queremos trabajar! Somos nosotros, los jóvenes, los que acusamos al capitalismo por negarnos un futuro digno.
El plan presentado por el gobierno no va a resolver la crisis capitalista, ni va a crear empleo. Lo que va a hacer es perjudicar a toda la clase obrera, para garantizar que la banca y los empresarios sigan amasando fortunas y especulando con el dinero público. En lugar de ceder a las brutales presiones de la Banca internacional, la UE, el FMI, los gobiernos europeos, la patronal y la derecha, aceptando los planes impuestos por los capitalistas, hay que obligar al gobierno del PSOE a que lleve a cabo medidas auténticamente socialistas en beneficio de las familias trabajadoras ¡Basta ya de que los sacrificios de la mayoría sirvan para mantener los privilegios de una minoría!
• Por una educación pública, científica, democrática, laica y gratuita
• Por un puesto de trabajo digno al finalizar los estudios, o subsidio
de desempleo indefinido de 1.100 euros al mes. No a la reforma laboral
• Ningún recorte en salarios, sanidad, educación y pensiones. Aumento
drástico del gasto público en los servicios sociales para dar empleo a
cientos de miles de trabajadores y jóvenes licenciados en desempleo
Si que hay riqueza en la sociedad para llevar a la práctica estas
medidas, lo que falta es una política auténticamente socialista para
ponerla al servicio de la mayoría y que defienda, entre otras, éstas
medidas:
• Aumento drástico de los impuestos a las grandes fortunas y a los
beneficios empresariales y a la banca.
• Nacionalización de la banca bajo el control democrático de los
trabajadores y sus organizaciones
¡Únete a Ikasle Sindikatua!