Este es el verdadero "plan de choque" del Gobierno de Puigdemont! La CUP debe rectificar!
El pasado 2 de febrero, la consejera de Educación, Meritxell Ruiz, fue interpelada por el PP acerca del mantenimiento de los conciertos educativos. La consejera aseguró al PP que los padres de los alumnos que van a la concertada pueden estar “no tranquilos, sino tranquilísimos”, e invito al PP a leer “el primer punto de nuestro programa electoral, donde se defiende el mantenimiento, aplicación y desarrollo de la LEC”, es decir, el mantenimiento de los conciertos educativos como hasta ahora, incluso financiando a los colegios que segreguen por sexo. La misma política de siempre, en beneficio de la enseñanza privada, controlada principalmente por la Iglesia Católica y sus diversas sectas, mientras se sigue desangrando a la pública con constantes recortes. Esta claro que sí hay dinero, ¡¡pero para la Iglesia Católica y los centros concertados!!
Esta es la naturaleza del actual Gobierno de Convèrgencia investido con el apoyo de la dirección de la CUP. Una vez más se demuestra como la burguesía catalana en realidad tiene esencialmente los mismos intereses que la burguesía rancia y casposa representada por el PP. Y como maniobrarán lo que sea necesario pero teniendo muy claro aquello que es irrenunciable, sus negocios e intereses de elite. Tampoco el PP, al que tanto preocupa cualquier alianza con fuerzas independentistas y la sacrosanta unidad de España, tiene problema alguno en apoyar a “independenstistas” responsables como Puigdemont.
En esto ha quedado el programa acordado con la dirección de la CUP, que aún siendo limitado ni siquiera Convèrgencia esta dispuesta a cumplirlo. Toda la izquierda, incluida la CUP, se ha manifestado en contra de mantener los conciertos económicos a los colegios que segreguen por sexos, algo totalmente correcto. Sin embargo la cuestión va mucho más allá, ya que incluso estos colegios siguen siendo una minoría en el conjunto de la educación concertada. Es necesario exigir la inclusión de toda la red concertada en una única red de escuelas públicas, quitándole a la Iglesia Católica el control y poder que ostenta en la enseñanza, heredado directamente de 40 años de franquismo. Todos los recursos públicos deben destinarse a tener una enseñanza pública gratuita, científica y de calidad. La CUP y el resto de la izquierda tienen en sus manos acabar con esta situación, con una Convergencia y una derecha en el Parlamente en completa débil, y que saldría completamente golpeada ante un nuevo proceso electoral y frente a la movilización en la calle.
Derecho a la autodeterminación sí! Dejarse engañar por la derecha no!