El pasado 17 de Octubre más de 250.000 jóvenes salieron a las calles en más de 100 manifestaciones que recorrieron las principales ciudades y localidades de todo el Estado, haciendo que la huelga general estudiantil de 72 horas convocada por el Sindicato de Estudiantes se convirtiera en un éxito de carácter histórico. Millones de jóvenes abandonaron sus aulas durante tres días para mostrar su rechazo a un gobierno que quiere acabar con la escuela pública, y condenarnos a un futuro de paro, precariedad y recorte de derechos democráticos.
Si hay un elemento que fue común a todas las movilizaciones impulsadas por el Sindicato de Estudiantes y la CEAPA los días 17 y 18 de Octubre fue el ambiente reivindicativo, pacífico y profundamente democrático en todas y cada una de las movilizaciones. La derecha y sus medios de comunicación por más que buscaban algún incidente que poder resaltar y magnificar para ocultar lo que era un verdadero clamor juvenil en defensa de nuestro presente y futuro no encontraban nada, y como no existía ningún elemento de estas características con el que desviar la atención, comenzó a difundirse por algunos de estos medios la “noticia” de que en Mérida sí que habían ocurrido actos con los que poder criminalizar primero a los estudiantes extremeños y después al conjunto de los que defendemos la escuela pública.
De la misma forma que desde el gobierno se tachaba al Sindicato de Estudiantes y a la CEAPA de “extremistas”, “radicales” y “terroristas” incluso antes de que se produjeran el primer día de huelga o la primera manifestación, a los estudiantes de Mérida se les empezó a imputar la agresión a una religiosa de un centro católico, el asalto a su centro de estudios, el intento de robo de material informático y la rotura de diferente mobiliario dentro y fuera del colegio en el que supuestamente se produjeron estos hechos.
Sin ninguna prueba y ningún fundamento estos medios de la derecha sacaron portadas y abrieron informativos con esta “noticia”, poniendo una diana sobre los jóvenes de Mérida y especialmente sobre Rafael Gonzalez, un estudiante de 24 años y compañero de las Juventudes de Izquierda Unida, que lo único que hizo, con el resto de sus compañeros, fue corear consignas reivindicando la defensa de la educación pública y un futuro digno para la juventud, a la vez que en todo momento estuvieron “escoltados” por un notable dispositivo policial que no tuvo que intervenir en ningún momento y “a las dos de la tarde se fueron a casa”.
Este inaceptable episodio de criminalización ha dado en las últimas horas una nueva vuelta de tuerca, cuando a primeras horas de esta mañana y según informa el diario Público.es se produjo la detención de "Rafael González [cuando] se encontraba desayunando en una cafetería de Mérida junto a un diputado de IU en Extremadura" "González se encontraba en el momento de su detención desayunando en una cafetería de Mérida junto al diputado de IU en Extremadura Víctor Casco y otro compañero antes de asistir a una manifestación de la Cumbre Social en la comunidad. Víctor Casco ha indicado que "es evidente que hay una campaña de difamación orquestada por el Ministerio del Interior después de las falsas acusaciones de El Mundo", en tanto que Rafael González –ha dicho– "no ha instigado ningún asalto a los Salesianos", algo que considera que "es evidente" y de lo que dice que además "hay pruebas físicas".
En este sentido, ha apuntado que "incluso el informe de la policía reconoce que ni [Rafael González] entró en el colegio –tal y como sostuvo él mismo en declaraciones a Público– ni los manifestantes que estaban todos en el patio y que no llegaron a entrar dentro del edifico". Además, ha señalado que "no hay una sola imagen ni prueba real que presente a unos supuestos asaltadores arrancando crucifijos, pegando a profesores o entrando en el comedor", y ha incidido en que "solamente hay unas declaraciones de un director del colegio que señala una puerta del exterior con pintadas que pueden ser de hace 30, 20, 10 ó 5 años y que no tienen ni siquiera que ver con los manifestantes que había allí". "Si uno ve las imágenes de la puerta son aquellas que hace todo quinceañero con las hormonas encendidas", ha añadido.
La Policía Nacional también detuvo en la noche de este viernes a tres personas, una de ellas menor de edad, por supuestamente haber participado en esos incidentes, según han informado a Europa Press fuentes policiales. Las detenciones se produjeron después de que la Fiscalía de Mérida decidiera ayer abrir de oficio "diligencias penales" acerca del supuesto intento por parte de un grupo de jóvenes de entrar en el recinto del centro educativo para protestar contra los recortes en Educación.
Sobre estos detenidos, el diputado Víctor Casco ha indicado que "son gente que ha estado en la manifestación" y que "no son militantes de Izquierda Unida", demintiendo la información que hoy publica El Mundo. "Son personas que tampoco han participado en ningún asalto, sino que estaban en el piquete junto con el resto de compañeros y que no han llegado en ningún momento a acceder al interior del edificio".
Según confirmaron a Europa Press fuentes de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx), la Fiscalía de Mérida pidió a la Policía Judicial que emitiera un informe con todos los datos de los que dispusiera sobre lo ocurrido en la mañana del miércoles en el Colegio Salesianos de Mérida con el objetivo de decidir si son constitutivas de delito por parte de algunos de los participantes.
Las diligencias continúan abiertas, por lo que no se descartan nuevas detenciones de otros participantes en los incidentes denunciados por el Colegio Salesianos de Mérida, quien les acusó de entrar en el centro educativo "profiriendo gritos contra la institución, violentando al personal que encontraban a su paso e intentando impedir el normal desenvolvimiento de la actividad académica".
A través de su cuenta de Twitter, la federación extremeña de IU ha denunciado que el Ministerio del Interior "utiliza la supuesta agresión en un colegio concertado" para "desprestigiar" al movimiento estudiantil y la militancia de IU. Asimismo, ha pedido al departamento de dirige Jorge Fernández Díaz que "se base en pruebas y no en la afinidad ideológica de los investigadores y testigos". "
Desde el Sindicato de Estudiantes queremos mostrar toda nuestra solidaridad con los compañeros de Mérida y especialmente con Rafael Gonzalez y los otros tres detenidos por ser víctimas de un burdo intento de criminalización que otros muchos jóvenes y trabajadores hemos vivido en las últimas semanas, meses y años, como así sucediera con el 15-M, la famosa portada del diario “La Razón”, o más recientemente contra el movimiento rodea el Congreso de los pasados 25-S y 29-S.
A parte de mostrar nuestra solidaridad con estos compañeros exigimos la libertad inmediata y sin cargos de todos los encausados, así como la dimisión de los responsables políticos de estas detenciones. Cuando desde el Sindicato de Estudiantes decimos que este gobierno es nostálgico del franquismo pensamos que no exageramos en lo más mínimo. Episodios tan lamentables como este son una prueba clara de cuál es la tradición política de quienes también en el terreno de las libertades democráticas quieren hacernos volver a los años 50 y 60, cuando los jovenes y trabajadores que luchaban por unas condicioens de vida digna se encontraban con la criminalización, los golpes y las detenciones.
¡Libertad inmediata y sin cargos para todos los detenidos!
¡Menos represión y mas eduación!
¡No a los recortes!