¡Grande-Marlaska y Mercedes González dimisión!

El pasado miércoles 7 de abril, más de 2.000 jóvenes, trabajadores, trabajadoras, vecinos y vecinas tomamos la Plaza Roja de Vallekas plantando cara a las y los fascistas de Vox, que pretendían ocupar nuestro barrio, y otros muchos barrios obreros de Madrid, difundiendo su mensaje españolista, racista, machista y homófobo. Ante el tremendo éxito de esta movilización antifascista, Santiago Abascal bajó del estrado y se encaró, rodeado por sus matones, con los manifestantes. Una acción claramente coordinada, que fue la señal para que los antidisturbios cargaran brutalmente contra quienes salimos a plantar cara al fascismo.

Esta brutalidad policial, que es la misma que sufrimos en las movilizaciones por la libertad de Pablo Hasél, se saldó con 4 detenidos y casi 40 heridos. Pero la saña de la Policía Nacional continuó con los detenidos, primero en la comisaría de Moratalaz y posteriormente en los calabozos de los juzgados de Plaza Castilla, a manos esta vez de la Guardia Civil, tal como señala uno de los detenidos y los dos partes de lesiones del hospital Gregorio Marañón. Al llegar a la comisaría, completamente indefenso, varios agentes le metieron en una sala, le desnudaron y le pegaron, provocándole tres abrasiones en la cabeza, otras dos en tórax y extremidades, una herida en la oreja, y doce contusiones más en tórax y extremidades. Estas agresiones, propias de la dictadura, son un ejemplo más de como la policía y la guardia civil, llena de simpatizantes y militantes de Vox, sigue violando los derechos humanos, ejerciendo su derecho impune a la violencia y la tortura.

Es completamente inaceptable que la fuerza policial, mandada por la delegada del Gobierno en Madrid (PSOE), Mercedes González, y el ministro del Interior, Grande-Marlaska, se haya vuelto a utilizar una vez más para proteger la impunidad de los fascistas y reprimir a golpe de porra a quienes nos movilizamos contra su discurso del odio.

Desde el Sindicato de Estudiantes exigimos la dimisión inmediata de ambos y de todos los mandos policiales que dieron la orden de cargar contra los manifestantes. Exigimos la depuración de la policía y la guardia civil, la expulsión inmediata de todos los elementos fascistas y la disolución de las Unidades Antidisturbios. Y por supuesto exigimos la retirada inmediata de todos los cargos a los detenidos y el fin de la represión.

La lucha es el único camino contra el fascismo y la represión y Vallekas ha dado una lección de cómo se combate a estos elementos. Este es el camino.