Este nuevo curso empieza tal y como terminó el anterior: con ataques a la educación pública. Será el primero en el que se eliminará la promoción automática, pero también en el que se recupera la calificación numérica en primaria – para facilitar la segregación en itinerarios – y la religión vuelve a ser evaluable, pudiendo ser causa de repetición. Son todas medidas que resultarán gratuitas para el ministerio.

Madrid 16 de Septiembre de 2003.

Este nuevo curso empieza tal y como terminó el anterior: con ataques a la educación pública. Será el primero en el que se eliminará la promoción automática, pero también en el que se recupera la calificación numérica en primaria – para facilitar la segregación en itinerarios – y la religión vuelve a ser evaluable, pudiendo ser causa de repetición. Son todas medidas que resultarán gratuitas para el ministerio. Pilar del Castillo miente cuanto habla de que son medidas que mejorarán la calidad. Que un estudiante pueda repetir sin que se pongan los recursos y los medios necesarios – inversión - para mejorar la calidad de la enseñanza y ayudar a los estudiantes más desfavorecidos es una condena al fracaso escolar. Las medidas de Pilar del Castillo son baratas porque son medidas destructivas, destinadas a segregar, elitizar y privatizar. Para arreglar una casa hace falta dinero, para demolerla basta con una maza.
No hay ley de financiación, ni la habrá. El consejero de educación de Valencia – del PP- se vanagloriaba de no necesitar dinero para aplicar la Ley de “calidad”. Sin duda, esto explica por qué en esta comunidad el 45% de las obras de Secundaria no están terminadas o por qué 6.000 estudiantes darán clases en barracones. En los últimos cursos, la derecha recortaba plazas públicas y plantilla de profesorado amparándose en que estaba descendiendo la natalidad y el número de estudiantes. Este curso el número de alumnos ha aumentado, ¿no se debería entonces aumentar las plazas públicas y las plantillas de profesores? Sin embargo no aumenta el presupuesto. ¿En qué quedamos?
Y es que los problemas fundamentales de la enseñanza continúan y la Ley de “Calidad” sólo va a empeorarlos: En Madrid 7.500 estudiantes empezarán el curso en barracones, 3.500 lo harán en colegios provisionales y 10.000 asistirán a aulas que no cumplirán la ratio de 25 alumnos por aula; en las escuelas de idioma, de artes o para adultos ha habido 15.000 no admitidos y otros 4.000 no admitidos en los ciclos formativos públicos. En una ciudad obrera como Getafe el 80% de los solicitantes de una plaza en escuelas infantiles públicas no ha obtenido plazas. Las cuantías de las becas han subido un ridículo 4% (sólo descontando la inflación real, no la propaganda “pepera”, prácticamente nos quedaríamos con una subida nula) mientras que las tasas en la universidad subirán entre un 3% y un 7% dependiendo de la comunidad, o el gasto de cada familia en material y matrículas ha subido un 6%.
El PP han dicho cómo será la Reválida. Hace ya dos años lo explicábamos: sustituyen la selectividad por una prueba más dura sin otro objetivo que endurecer el acceso a la universidad. Según el gobierno, esta nueva prueba mejorará la calidad porque en lugar de exigirse un 4 para aprobar el examen – como sucedía con la selectividad – será necesario un 5. Esta medida no mejorará la calidad de nada. Sólo aumentando ese punto más de un 20% de estudiantes que hasta ahora aprobaban no sólo no podrán ir a la universidad sino que ni siquiera contarán con el título de bachillerato. Ese es el verdadero objetivo. Otra lindeza será por ejemplo el examen oral de idioma, una prueba más subjetiva, arbitraria. Esta medida no garantiza que los estudiantes aprendan inglés o francés. El PP no invierte para dotar a los centros públicos con laboratorios de idiomas, profesores nativos, intercambios... sólo impone un examen más difícil para cribar y ayudar a que repunten academias privadas y negocios turbios como Opening.
En universidad, van a devaluar las licenciaturas eliminando las especializaciones, para que no sean títulos con salida en el mercado laboral, por esa misma razón desaparecerán las diplomaturas. Dicen que será para converger con Europa. Como siempre sólo en lo que les interesa. Por el contrario, potenciarán los masters, hasta ahora voluntarios al terminar la carrera. Se harán imprescindibles, y claro, más caros y más elitistas y selectivos. Hablan de introducir incluso una selectividad interciclos. Pese a las necesidades sociales, a la derecha le sobran universitarios. Los que estudien que paguen y que paguen más: otra sangrante medida afectará a las matrículas ya que incluirán en su precio las horas de estudio que el alumno efectúe fuera de los muros de la facultad.
Pero la perla ha sido la reforma de la religión. Religión o su alternativa, “religión II” – el hecho religioso, supuestamente laica - será evaluable: puntuarán para el expediente y para acceder a la universidad. En 2º de la ESO, por ejemplo, dispondrá de tantas horas como matemáticas. El primer paso para recuperar una religión católica obligatoria será convertirla en “maría”: fácil de aprobar en comparación a su alternativa – que será un ladrillo - y por lo tanto escogida por muchos estudiantes. Es una reforma ideológica, para aumentar las prebendas y privilegios de la Iglesia. No podemos olvidar que los profesores de religión seguirán siendo puestos a dedo por la Iglesia que cobra del Estado por ello. Se trata por tanto de desviar más fondos públicos a las arcas del Vaticano. ¿Quién dice que el Estado español es laico? El objetivo del PP es retomar el estado confesional propio de los años 50.
Pero no sólo el PP ataca a la educación pública. La derecha nacionalista también protagoniza una campaña de acoso y derribo a la educación: PNV, CiU y CC comparten la filosofía privatizadora de Pilar del Castillo. El gobierno de CiU en Catalunya invierte en educación un 37% menos que en el resto del Estado y sin embargo un 61% más a la educación concertada. Aunque intentan diferenciarse del PP rechazando de boquilla la Ley de “calidad” no es más que demagogia: Euskadi por ejemplo es la comunidad con un mayor porcentaje de educación privada de todo el Estado. En lo fundamental – es decir en el dinero, lo que realmente podría aumentar la calidad de la enseñanza y la disminución del fracaso escolar – la política de Puyol y Mas, como la del PNV, no difiere de la de Aznar y Rajoy.

Gastos militares para gastos sociales
Precisamente, es Rajoy la estrella actual de los telediarios. Nosotros no olvidamos la etapa del “Señor de los hilillos” al frente del Ministerio de Educación, protagonista de un intento de endurecimiento de la selectividad que logramos frenar gracias a la movilización en la calle. Tratan de presentarlo como un dialogante, pero sabemos que en nada difiere ni su talante ni sus políticas de las desarrolladas por Aznar: ataque, recorte, ataque, recorte.
El eslogan de la próxima campaña electoral del PP podría ser: armas en vez de mantequilla. Conceden 25.000€ a la Fundación Francisco Franco y el Ministerio de Defensa va a gastar los escandalosos 4 mil millones de euros – equivalente a 700 mil millones de pesetas - en tanques, helicópteros, submarinos y otros juguetes. Si el ejercito español va a estar años ayudando al imperialismo estadounidense a ocupar Iraq, necesitarán dinero, así que la derecha continuará recortando los gastos sociales. La población iraquí, mientras tanto, sigue resistiendo ante la ocupación colonial extranjera. La guerra que allí se libra seguirá costando nuevas vidas humanas y, por culpa de Aznar, también la de soldados españoles. Para que estas tropas vuelvan, para terminar con la ocupación militar de Iraq, para que todos estos recursos se dediquen a cubrir las necesidades sociales, como la educación pública, el Sindicato de Estudiantes, junto a otras organizaciones, se suma a la Jornada Internacional convocada para el próximo 27 de Septiembre. La manifestación de Madrid será a las 19.00 desde Neptuno.
El Sindicato de Estudiantes rechaza la política que está desarrollando la derecha y sigue apostando por el camino de la lucha y de la movilización para revertir la ofensiva reaccionaria del PP. Han sido dos años de movilizaciones, en las que especialmente la juventud ha demostrado el rechazo a la política de Aznar. Este es el camino. Nosotros no nos quedaremos con los brazos cruzados ante estas medidas y responderemos en la calle. Por eso volveremos a insistir a las organizaciones sindicales y políticas de izquierdas que se pongan a la cabeza de la lucha contra todas estas medidas. Sólo la lucha y la movilización podrá derrotar a la derecha.

Ejecutiva Estatal del Sindicato de Estudiantes.